En este blog solo encontrarás reseñas de libros que en algún momento me ha apetecido leer. Ninguna ha sido encargada ni pedida por autores o editores, y todos los libros los he comprado. En resumen: un blog de reseñas no interesadas para que sean interesantes.

lunes, 16 de noviembre de 2020

Sobre los huesos de los muertos – Olga Tokarczuk

 


 

                Olga Tokarczuk (nacida en Polonia el 29 de enero de 1962), recibió en 2019 el Premio Nobel de Literatura correspondiente a 2018.

                Lo único que he leído de su obra ha sido Sobre los huesos de los muertos, novela que sorprende más tras el Nobel, premio más asociado a la narrativa que al género negro; novela que sorprende, también, porque su maestría y elegancia en el uso del lenguaje y de ciertos recursos expresivos proclaman la pobreza de la mayoría de la novelas del género, a las que por costumbre les perdonamos la sustitución de la falta de cuidado literario por la simple corrección formal, a cambio de que nos cuenten una historia entretenida.

                Janina Duszejko, que aborrece su nombre de pila, es una ingeniera retirada que da clases de inglés en un montañoso pueblecito polaco cerca de la frontera con Chequia; aunque, más bien, es una de las escasas habitantes de un puñado de casitas que solo se pueblan en los escasos meses en los que la nieve y el hielo no lo invaden todo.

                Janina, a medida que la novela avanza, parece una vieja loca: no cesa de escribir cartas a la policía y a todo el que se pone a tiro exigiendo medidas, entre extravagantes e imposibles, vinculadas al cuidado de la naturaleza, y, en lo que parece el colmo de su obsesión, envía varias misivas avisando de la sobrenatural explicación para ciertos accidentes producidos en la zona, que han tenido como víctimas, invariablemente, a personas poco respetuosas con el medio ambiente y, en especial, con esos animales para los que la frontera entre Polonia y Chequia simplemente no existe. Los animales, según ella, se están vengando del ser humano.

                Según pasan las páginas, sin que, a diferencia de las novelas legras convencionales, el lector tenga noticia de investigación alguna oficial o extraoficial, las rarezas de la protagonista, las idas y venidas de algunos secundarios –todos preocupados por la alarmante cantidad de muertes en un entorno tan pequeño- y lo que se va mostrando de las víctimas, conducen a un desenlace inesperado casi hasta el mismo instante en que se produce.

                Una novela que entretiene con calidad literaria y que, por exposición de extremos, invita a reflexionar sobre la relación con la naturaleza y sobre la naturaleza de la culpa.




2 comentarios:

  1. Este ya lo tenía en mi lista de pendientes, pero después de leer tu reseña aún tengo más ganas de leerlo. Creo que es un libro que disfrutaré mucho.
    ¡Feliz semana!

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  2. ¡Muchas gracias! Los mismos deseos para ti. Espero que te guste y que cuentes lo que te pareció.

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